Acerca
de la imagen corporal
Por imagen del cuerpo entendemos aquella representación que
nos formamos mentalmente de nuestro propio cuerpo, es decir la forma en que se
nos aparece.
Este es, por cierto, uno de los aspectos del que estarían
conformando la unidad del ser, esto se menciona porque estos aspectos no actúan
solos, sino que son afectados por múltiples factores, como se mencionará
posteriormente. Regresando a lo anterior, en efecto, la imagen corporal se
integra a partir de la participación de ciertas sensaciones;
Vemos algunas partes de la superficie corporal;
Tenemos impresiones táctiles, térmicas, de dolor, etc.
Recibimos sensaciones que provienen de los músculos y sus
aponeurosis,
Recibimos sensaciones provenientes de las viseras.
Acerca del esquema corporal
Así, el esquema corporal es la imagen tridimensional que
cada persona tiene de sí misma. Y podemos llamar a esta imagen. “imagen
corporal”
Se trata
de la experiencia inmediata de que existe una unidad corporal. Y si bien
percibimos esta unidad, y pese a que proviene de los sentidos, se trata de algo
más que una percepción. Hay en ella sí, representaciones mentales, pero tampoco
es una simple representación. En efecto, la corteza sensorial, además de tener
la función de ser un órgano de atención
local, es la que almacena impresiones pasadas. Estas últimas, pueden surgir en
la conciencia como imágenes, pero mayormente, permanecen fuera de la conciencia
central. Así, forman modelos organizados de nosotros mismos que podrían
denominarse como esquemas. Estos esquemas modifican las impresiones aferentes,
en forma tal, que la sensación definitiva de posición corporal surge en la
conciencia cargada de la relación con algo ocurrido anteriormente.
Todos los
cambios posturales surgen en la conciencia llevando ya la carga de su relación
con algo ocurrido anteriormente. Lo cual, estaría significando que cada postura
o movimiento nuevo queda registrado sobre este esquema plástico, y la actividad
de la corteza pone a cada nuevo grupo de sensaciones provocadas por la alteración
de la postura.
En
efecto, la Expresión Corporal
Es decir,
que, se trataría de una danza, que produce efectos múltiples: Contribuye a la
integración saludable de la imagen corporal, lo cual, estaría formando parte de
la sanción de la imagen corporal distorsionada, que por ejemplo, muchas veces
se observa en casos conocidos de trastornos de alimentación.
Imagen
corporal y percepción
La imagen
corporal se ubica en el lado de nuestra vida psíquica correspondiente a las
impresiones. Pero no hay ninguna impresión que no encuentre, al mismo tiempo
una expresión. No hay percepciones sin acciones. Toda impresión lleva consigo
impulsos eferentes. En efecto, la impresión y la expresión forman una unidad
definida.
Siempre
existe una personalidad que experimenta la percepción. Al estudiar la imagen
corporal, debemos concentrarnos en la relación de las impresiones de nuestros
sentidos con nuestros movimientos y la motilidad general. Cuando percibimos o
imaginamos un objeto, o cuando construimos la percepción de un objeto, no
actuamos como un aparato perceptor, sino con la unidad del ser.
El modelo
postural
El modelo
postural, se halla en perpetua autoconstrucción y autodestrucción internas.
Esquema
plástico
Esquema, es el patrón combinado, sobre cuya base se miden todas
las bases subsiguientes de la postura antes de ingresar a la conciencia, mediante
alteraciones de la posición, construimos
constantemente un modelo postural de
nosotros mismos, sujeto a cambios
continuos. Cada postura o movimiento nuevo queda registrado en este esquema
plástico, y la actividad de la corteza pone a cada grupo de sensaciones
provocadas por la alteración de la postura, en relación con aquel.
Todo esto, se relaciona con el aprendizaje del movimiento
conciente de nuestros cuerpos, lo cual se suma al modelo de nosotros mismos y
pasa a formar parte de dichos esquemas; ¿Cómo interviene la Expresión Corporal
